Un título europeo beneficiará a los estudiantes al impulsar la movilidad educativa y hacer que los graduados sean más atractivos para los empleadores. Al mismo tiempo, ayudará a satisfacer la demanda del mercado laboral y, en última instancia, impulsará la competitividad de Europa.
El paquete se compone de tres iniciativas que abordan las barreras legales y administrativas para establecer programas de titulación conjuntos competitivos a nivel de licenciatura, maestría o doctorado. Es importante destacar que lo hacen respetando plenamente la autonomía de las universidades y la competencia de los países de la UE y los gobiernos regionales en el ámbito de la educación superior.
La primera de estas iniciativas es el plan para un título europeo, que establece un camino de cooperación concreto entre los países de la UE y el sector de la educación superior. Dada la diversidad de los sistemas europeos de educación superior, se seguirá un enfoque gradual con dos posibles puntos de entrada.
- • un sello europeo preparatorio : los programas conjuntos que cumplan los criterios europeos propuestos recibirían un sello europeo preparatorio y los estudiantes recibirían un certificado de sello europeo junto con su título conjunto
- • Un título europeo : un nuevo tipo de cualificación anclada en la legislación nacional, otorgada conjuntamente por varias universidades o por una entidad jurídica común establecida por dichas universidades, y reconocida automáticamente.
Para apoyar esto y apoyar al sector de la educación superior en general, hay otras dos iniciativas en el paquete. Uno analiza formas de mejorar los procesos de garantía de calidad y el reconocimiento automático de calificaciones en la educación superior, y el otro, cómo hacer que las carreras académicas sean más atractivas y sostenibles.