La Junta de Gobierno del Ilustre Colegio de Abogados de las Illes Balears (ICAIB) ha decidido, por unanimidad, conceder a Vicente Magro, magistrado de la Sala segunda del Tribunal Supremo, el «Premio Enriqueta Pascual por la Igualdad» en su edición de 2023.
El premio reconoce «la aportación innegable de Vicente Magro a la defensa de la igualdad entre mujeres y hombres que ha realizado en su carrera como jurista y, muy especialmente, por su contribución, desde el Derecho y la judicatura, a la protección de las mujeres víctimas de la violencia de género».
La presidenta del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE), Victoria Ortega, y el decano de la abogacía balear, Martín Aleñar, fueron los encargados de entregar el galardón el pasado 29 de abril en el marco del acto de celebración de las bodas de oro de los colegiados del ICAIB y en el que también tuvo lugar la jura de seis nuevas abogadas.
Magro agradeció doblemente el premio: «Primero, porque es un premio que reconoce mis aportaciones en la lucha contra la violencia de género. Y segundo, porque junto con el premio Soledad Cazorla, del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, que también recibí, son los dos galardones referentes en este campo».
El magistrado, que se congratuló también de ser el primer hombre que recibe el galardón, expresó su convencimiento de que «la lucha contra la violencia de género es una lucha de hombres y mujeres contra el maltrato, es una causa de todos. Y el mejor antídoto es la educación».
El premiado, además, instó a la sociedad a luchar contra «el negacionismo de la violencia y la desigualdad de género», una realidad «muy preocupante», como lo es también, dijo, el repunte de la violencia vicaria. De hecho, opinó, posiblemente es el miedo de muchas mujeres a esa violencia sobre los hijos lo que hace que muchas de ellas no denuncien a sus agresores.
Vicente Magro, luchador incansable contra la violencia de género
El actual magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo Vicente Magro, desarrolló una parte importante de su carrera profesional como presidente de la Audiencia Provincial de Alicante donde puso en marcha medidas pioneras para la erradicación de los malos tratos y la lucha contra la violencia de género.
Bajo su mandato, se creó una oficina institucional de coordinación para aplicar programas de atención a las víctimas y de reeducación en violencia de género y violencia doméstica. Además, implementó un protocolo de uso de la videoconferencia para declaraciones de víctimas de estos delitos, en el que estaban acompañadas en todo momento por profesionales (psicólogos, criminólogos o trabajadores sociales) para que sintieran que no estaban solas en esos duros momentos. También se crearon protocolos de prevención contra la violencia juvenil y en concreto la de género. Y se recibía en la Audiencia de Alicante a colegios para explicarles la idea del respeto a la mujer y la igualdad y los valores que deben presidir la convivencia.
Desde 2002 Vicente Magro es miembro asesor del Observatorio de Violencia doméstica y de género del Consejo General del Poder Judicial.
Promotor de la aplicación de la «perspectiva de género» en las resoluciones judiciales, es autor de más de 80 libros y más de 1.500 artículos jurídicos, desde los que también ha aportado su análisis doctrinal para combatir la lacra de la violencia de género. Por citar alguno de los últimos publicados en Diario LA LEY: «No matarás… a tus propios hijos» en el que aborda el tema del drama de la violencia vicaria o «Evitemos el "silencio cómplice" en las comunidades de propietarios ante la violencia de género y sexual en los hogares» en el que propone la elaboración de protocolos de coordinación en las comunidades de propietarios para evitar que la sede de la violencia de género y sexual que se produce en los hogares españoles siga siendo un lugar donde se potencia la impunidad.
Además de su impresionante producción jurídica, Magro es autor de cinco novelas, una de las cuales, «Te querré siempre, para mí», está dedicada también a la violencia de género.
Premio Enriqueta Pascual
El galardón fue creado en 2019 a instancias de la Comisión de Igualdad de la corporación colegial balear con el objetivo de reconocer públicamente la labor de las personas –físicas o jurídicas– que, desde su posición profesional en la rama de las ciencias jurídicas, o en estrecha relación con ellas, trabajan para erradicar la discriminación por razón de sexo o género y para avanzar hacia la igualdad plena, real y efectiva, entre mujeres y hombres.
El premio toma su nombre de Enriqueta Pascual Gil, la primera mujer que se incorporó al ICAIB como abogada ejerciente, en el año 1956.
En las cuatro ediciones anteriores resultaron ganadoras la presidenta del Consejo General de la Abogacía Española, Victoria Ortega; la exdecana del Colegio de la Abogacía de Barcelona (ICAB), María Eugenia Gay; la fundación Amadip-ESMENT y la expresidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas.