Carlos B Fernández. Con vistas a las próximas elecciones europeas, y ante los posibles usos de esta tecnología en el inminente período electoral, la recientemente creada Oficina de Inteligencia Artificial pide a las organizaciones que utilicen esta tecnología que se adhieran al Pacto para la IA. Es decir, que adopten una postura proactiva y se anticipen a la publicación del inminente Reglamento de IA comenzando a aplicar las medidas previstas en esta futura norma en relación con algunos aspectos críticos de esta tecnología.
Para ello ha abierto una dirección electrónica que permite a las empresas adherirse a esta iniciativa y otra que permite a aquellas que ya hayan implementado directrices o procesos internos para asegurar su desarrollo, que las comparten e incluso evalúen.
Un compromiso voluntario de la industria
El Reglamento de IA, que entrará en vigor a los veinte días de su publicación, tiene un largo período de vacatio legis, antes de ser plenamente aplicable.
Y aunque algunas disposiciones de la norma, como la relativa a los sistemas prohibidos, comenzarán a ser aplicables ya a los seis meses de dicha publicación, otros requisitos, en particular los relativos a los sistemas de e IA de alto riesgo y otras disposiciones solo serán aplicables al final de un período transitorio (es decir, el tiempo transcurrido entre la entrada en vigor y la fecha de aplicabilidad).
En este contexto, la Comisión está promoviendo el Pacto de IA, buscando el compromiso voluntario de la industria de anticiparse a la Ley de IA y comenzar a aplicar sus requisitos antes del plazo legal.
El Pacto AI es un plan que fomentará la implementación temprana de las medidas previstas por la Ley AI. Las empresas tendrán la oportunidad de demostrar y compartir su compromiso con los objetivos de la futura Ley de IA y prepararse desde el principio para estar preparadas para su implementación. Más específicamente, el Pacto alentará a las empresas a comunicar voluntariamente los procesos y prácticas que están implementando para prepararse para el cumplimiento y garantizar que el diseño, desarrollo y uso de la IA sea confiable.
A estos efectos, la primera convocatoria de manifestaciones de interés se puso en marcha en noviembre de 2023, obteniendo respuestas de más de 550 organizaciones de diversos tamaños, sectores y países.
Los compromisos de la industria tomarán la forma de promesas (declaraciones de compromiso o declarations of engagement) para trabajar hacia el cumplimiento de la próxima Ley de IA, acompañadas de detalles sobre acciones concretas que se están llevando a cabo o planificadas para abordar requisitos específicos de la futura Ley de IA. Dichos compromisos pueden incluir un enfoque gradual, es decir, esbozar planes para avanzar, dentro de un plazo definido, hacia niveles de ambición más altos que las acciones ya implementadas.
La Comisión recopilaría y publicaría los compromisos con el fin de proporcionar visibilidad, aumentar la credibilidad y generar confianza adicional en las tecnologías desarrolladas por las empresas que participan en el Pacto.
Dos pilares
Desde entonces, la Oficina de IA ha iniciado el desarrollo del Pacto de IA, que se estructura en torno a dos pilares:
El primer pilar actúa como puerta de entrada para involucrar a la red del Pacto por la IA (aquellas organizaciones que han expresado su interés en el Pacto), fomenta el intercambio de mejores prácticas y proporciona información práctica sobre el proceso de aplicación de la Ley de IA;
El segundo pilar anima a los proveedores y los implementadores de sistemas de IA a prepararse con antelación y a adoptar medidas para cumplir los requisitos y obligaciones establecidos en la legislación.
Más en concreto, el Pilar I se orienta a reunir e intercambiar información con la red del Pacto por la IA
En el marco del primer pilar, los participantes contribuyen a la creación de una comunidad colaborativa, compartiendo sus experiencias y conocimientos. Esto incluye talleres organizados por la Oficina de IA que proporcionan a los participantes una mejor comprensión de la Ley de IA, sus responsabilidades y cómo prepararse para su aplicación. A su vez, la Oficina de IA puede recopilar información sobre las mejores prácticas y los desafíos a los que se enfrentan los participantes.
En este contexto, los participantes pueden compartir las mejores prácticas y políticas internas que pueden ser útiles para otros en su viaje de cumplimiento. En función de las preferencias de los participantes, estas mejores prácticas también podrán publicarse en línea en una plataforma en la que la Oficina de IA compartirá información sobre el proceso de aplicación de la Ley de IA.
Por su parte, el Pilar II se orienta a facilitar y comunicar los compromisos de la empresa
El objetivo de este pilar es proporcionar un marco para fomentar la pronta aplicación de algunas de las medidas de la Ley de IA. Esta iniciativa alienta a las organizaciones a divulgar proactivamente los procesos y prácticas que están implementando para anticipar el cumplimiento. Específicamente, las empresas que proporcionan o implementan sistemas de IA pueden demostrar y compartir sus compromisos voluntarios con respecto a la transparencia y los requisitos de alto riesgo y prepararse desde el principio para su implementación.
Los compromisos adoptan la forma de compromisos que son «declaraciones de compromiso». Estos compromisos contienen acciones concretas (planeadas o en curso) para cumplir los distintos requisitos de la Ley de IA e incluyen un calendario para su adopción. Estas declaraciones de compromiso también pueden adoptar la forma de objetivos incrementales.
Se pedirá a las organizaciones que se comprometan a llevar a cabo acciones preparatorias que informen periódicamente sobre sus compromisos. La Oficina de IA recoge y publica los compromisos para garantizar la visibilidad, aumentar la rendición de cuentas y la credibilidad, y reforzar la confianza en las tecnologías desarrolladas por las organizaciones que se han comprometido a cumplir los compromisos.
Beneficios para los participantes
Según explica la Comisión, con esta iniciativa pretende colaborar con las organizaciones participantes, apoyándolos en:
- Desarrollar un entendimiento común de los objetivos de la Ley de IA
- Adoptar medidas concretas para comprender, adaptar y prepararse para la futura aplicación de la Ley de IA (por ejemplo, crear procesos internos, preparar al personal y autoevaluar los sistemas de IA);
- Compartir conocimientos y aumentar la visibilidad y credibilidad de las salvaguardias establecidas para demostrar una IA fiable;
- Generar confianza adicional en las tecnologías de IA
El Pacto permite a los pioneros y a los participantes ambiciosos probar y compartir sus soluciones con la comunidad en general.