Investigación y lucha contra el trabajo forzoso
El presente Reglamento crea el marco necesario para la adopción de medidas legales contra los productos fabricados con trabajo forzoso en el mercado interior. La Comisión creará una base de datos de productos o áreas de riesgo de trabajo forzoso para apoyar la labor de las autoridades competentes en la evaluación de posibles infracciones del presente Reglamento. Sobre la base de una evaluación de los posibles riesgos, la Comisión (en caso de utilización de trabajo forzoso fuera de la UE) o las autoridades de los Estados miembros (en caso de utilización de trabajo forzoso en su territorio) podrán iniciar una investigación.
Las autoridades de los Estados miembros deben compartir información con otros Estados miembros si sospechan que se están produciendo violaciones del reglamento en otras partes de la Unión Europea, o compartir información con la Comisión si sospechan que se está utilizando trabajo forzoso en un tercer país. La decisión final (es decir, prohibir, retirar y eliminar un producto fabricado con trabajo forzoso) la tomará la autoridad que dirigió la investigación. La decisión adoptada por una autoridad nacional se aplicará en todos los demás Estados miembros, sobre la base del principio de reconocimiento mutuo.
Próximos pasos
Tras la aprobación del Consejo, se ha adoptado el acto legislativo.
Tras ser firmado por el Presidente del Parlamento Europeo y el Presidente del Consejo, el Reglamento se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea y entrará en vigor al día siguiente de su publicación. Será aplicable tres años después de la fecha de entrada en vigor.
Fondo
Aproximadamente 27,6 millones de personas trabajan en condiciones de trabajo forzoso en todo el mundo, en muchas industrias y en todos los continentes. La mayor parte del trabajo forzoso se lleva a cabo en el sector privado, aunque una parte es impuesta por las autoridades públicas.
El 14 de septiembre de 2022, la Comisión propuso un reglamento para prohibir los productos fabricados con trabajo forzoso en la UE. El Consejo adoptó su posición negociadora el 26 de enero de 2024. Los dos colegisladores (Consejo y Parlamento) alcanzaron un acuerdo provisional el 5 de marzo de 2024.
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Propuesta de la Comisión