Antecedentes
La UE quiere garantizar que los consumidores puedan buscar reparación en lugar de reemplazo cuando un producto está roto o defectuoso. Por eso, en marzo de 2023, la Comisión propuso nuevas normas comunes para contrarrestar la eliminación prematura de bienes reparables.
El 2 de febrero de 2024, el Consejo y el Parlamento Europeo alcanzaron un acuerdo provisional sobre la directiva sobre el derecho a reparar (o R2R). Los elementos principales son:
- — un derecho para los consumidores a solicitar a los fabricantes que reparen productos que son técnicamente reparables según la legislación de la UE (por ejemplo, lavadoras, aspiradoras o teléfonos móviles)
- — un formulario de información de reparación europeo gratuito
- — una plataforma de reparación en línea para conectar a los consumidores con los reparadores
- — una extensión de 12 meses del período de responsabilidad del vendedor después de la reparación de un producto
Al crear incentivos para que los productores y consumidores prolonguen los ciclos de vida de los productos, la nueva legislación también reducirá los residuos y promoverá modelos comerciales más sostenibles.
Reparación más fácil
La presente directiva adoptada crea un conjunto de herramientas e incentivos para hacer que las reparaciones sean más atractivas para los consumidores. Entre ellas se incluyen exigir a los fabricantes que reparen productos que son técnicamente reparables según la legislación de la UE; la disponibilidad de un formulario de reparación voluntaria con información clara sobre el proceso de reparación (plazos, precios, etc.); una plataforma europea en línea donde los consumidores pueden encontrar fácilmente servicios de reparación y la extensión de la garantía legal a 12 meses si los consumidores eligen la reparación en lugar de la sustitución.
La lista de productos reparables puede ampliarse en el futuro: siempre que la Comisión introduzca nuevos requisitos de reparabilidad para determinados productos, estos se añadirán a la directiva R2R.
Actuaciones futuras
Tras la presente aprobación del Consejo, se ha adoptado el acto legislativo. Tras ser firmada por el Presidente del Parlamento Europeo y el Presidente del Consejo, la directiva se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea y entrará en vigor a los veinte días de su publicación. Los Estados miembros tendrán 24 meses desde la entrada en vigor para transponer la directiva a su legislación nacional.