Con motivo de la celebración del Día Europeo de la Protección de Datos el próximo 28 de enero, la Asociación Profesional Española de Privacidad (APEP) ha hecho un llamamiento a organizaciones públicas y privadas sobre la necesidad de adaptarse cuanto antes al Reglamento General de Protección de Datos (LA LEY 6637/2016) (RGPD), que será de plena aplicación a partir del 25 de mayo y la conveniencia de contar para ello con profesionales expertos en esta materia.
En particular la Asociación recomienda acudir a profesionales que ofrezcan seguridad, confianza y solidez, para la correcta adecuación al RGPD.
En este sentido, la APEP ha mostrado su preocupación por la difusión de ofertas de servicios de consultariía "a coste cero", de sospechosa calidad y legalidad, así como por otro tipo de ofertas fraudulentas amparadas en las ayudas a la formación de la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo.
La Asociación ha alertado igualmente, en especial a las PYMES, sobre la aparición de determinadas herramientas o sistemas de autoevaluación y autocumplimiento normativo que pueden ocasionar la creencia errónea de que su utilización implica la adaptación a la normativa y puede sustituir el asesoramiento profesional. Estas prácticas comprometen un derecho fundamental de los ciudadanos y pueden afectar muy negativamente a las organizaciones, a la vez que banalizan un trabajo esencial en la sociedad actual y desprestigia el sector.
Nueva cultura de protección de datos
Esta Asociación recuerda que la nueva normativa es compleja y cambia el modelo actual de privacidad en los responsables y encargados de tratamientos de datos personales. El Reglamento europeo busca una implicación y unos resultados en protección de datos y seguridad más concretos, y otorga a las personas un mayor control sobre sus datos.
Por ello introduce una nueva cultura de protección de datos en todas las organizaciones que conlleva cambios organizativos en los procesos de negocio y en la tecnología. Aspectos como el nombramiento del Delegado/a de Protección de Datos (o DPO, por sus siglas en inglés), la privacidad desde el diseño y por defecto, la realización de evaluaciones de impacto en privacidad o análisis de riesgos o la gestión de brechas de seguridad se vuelven fundamentales. Por eso se hace urgente la concienciación y compromiso de todo el tejido empresarial español y el sector público.
La importancia del DPO
Según la APEP, para el diseño de una estrategia en protección de datos, la adecuación de sus modelos de negocio y procedimientos al RGPD y la formación de su plantilla, las organizaciones públicas y privadas necesitan sin duda diversos tipos de profesionales de la privacidad que les ayuden a asesorar a sus órganos de gobierno.
En este sentido, y aunque su nombramiento no sea obligatorio en todos los casos, la figura del Delegado de Protección de Datos (o DPO, por sus siglas en inglés) será esencial, conforme al RGPD y la futura “LOPD”.
Tanto si el profesional es interno como si es un asesor externo, el experto en privacidad, sea DPO o no, deberá cumplir unos requisitos mínimos de conocimientos y experiencia, que pueden alcanzarse y acreditarse mediante formación, certificación profesional y la pertenencia y participación en las actividades de una asociación profesional como APEP.
Por ello, destaca la APEP, esta asociación apuesta decididamente por una formación de calidad y una certificación que distingue a sus asociados como profesionales confiables y reconocibles.