Con motivo de la publicación del n.o 10.000 del Diario LA LEY queremos conocer la opinión de nuestros lectores y colaboradores sobre qué supone una publicación como el Diario en su día a día profesional. ¿Qué les aporta? ¿Cómo les ayuda? ¿Por qué nos leen? Mándanos un correo a es-diariolaley@wolterskluwer.es indicando «testimonio» en el asunto y compártelo con todos los lectores.
Será suficiente con un breve texto (no más de 400 palabras). Manda también tu nombre, cargo y una foto. Semanalmente, publicaremos los testimonios que nos vayan llegando. Os esperamos. Muchas gracias.
Seguimos recibiendo testimonios de lectores y colaboradores… Te los presentamos por orden alfabético.
Julio Banacloche Palao, Catedrático de Derecho Procesal UCM
El único que permite publicar un artículo de actualidad con una cierta rapidez, una amplia difusión y en una revista de calidad
La publicación del ejemplar número 10.000 del Diario LA LEY es una magnífica noticia para el panorama editorial jurídico español, de la que nos sentimos especialmente satisfechos los autores que llevamos muchos años (en mi caso, más de veinticinco) colaborando con LA LEY-Wolters Kluwer. El Diario LA LEY es a día de hoy un instrumento imprescindible para el conocimiento de las novedades legislativas y jurisprudenciales que se producen en nuestro país, y prácticamente el único que permite publicar un artículo de actualidad con una cierta rapidez, una amplia difusión y en una revista de calidad.
La lectura de las publicaciones del Diario LA LEY permite hacer un seguimiento de la aparición y evolución de las principales leyes de los últimos 40 años, de las polémicas que han suscitado y de su aplicación en los tribunales, por lo que se convierte en una fuente de información única e imprescindible para quien desee conocer cómo ha sido el devenir del Derecho en España en las últimas décadas. Además, dado que los principales juristas patrios se han asomado a sus páginas con gran frecuencia, muchos de los artículos publicados en él se cuentan entre los más interesantes y relevantes que se han escrito por nuestra doctrina y son referencia inexcusable cuando se estudian determinadas materias.
Por todas esas razones no puedo sino agradecer a quienes han trabajado y trabajan en el Diario LA LEY su buen hacer a lo largo de todos estos años, felicitarles por ello y desearles que continúen contribuyendo a la formación de los juristas españoles y al análisis del sistema jurídico de nuestro país.
Moisés Barrio Andrés, Letrado del Consejo de Estado, Profesor de Derecho digital y director del postgrado en Legal Tech y transformación digital (DAELT) de la Escuela de Práctica Jurídica de la Universidad Complutense de Madrid
Foro de ideas que enriquece diariamente a todos los operadores jurídicos
Quiero felicitar a todo el equipo que hace posible que todas las mañanas puntualmente podamos recibir el número diario. En un mundo donde padecemos infoxicación, el desde siempre pionero y disruptivo Diario LA LEY. Revista Jurídica Española de Doctrina, Jurisprudencia y Bibliografía es el faro que nos ofrece una visión conjunta de las últimas novedades en nuestra disciplina. Esta publicación se ha convertido en un inmenso depósito de referencias jurídicas de muy alta calidad, al tiempo que constituye un foro de ideas que nos enriquece diariamente a todos los operadores jurídicos.
Fidel Ángel Cadena Serrano, Fiscal de Sala del Tribunal Supremo
Los artículos doctrinales que se plasman en sus números contribuyen a reforzar el Estado de Derecho
El Diario LA LEY celebra, con orgullo legítimo, un acontecimiento histórico en su singladura jurídica particular: la publicación de 10.000 ejemplares. Felicidades deben darse a los impulsores de su creación.
Entiendo que los artículos doctrinales que se plasman en sus números contribuyen a reforzar el Estado de Derecho. El comentario de los especialistas de cada área jurídica sobre las resoluciones del TS o los temas de candente actualidad proporcionan puntos de vista que enriquecen la justicia.
Los comentaristas de LA LEY contribuyen, desde sus reflexiones, a aportar estudios meditados que puedan servir para fortalecer la justicia y para crear una conciencia colectiva de respeto a la ley y los bienes jurídicos.
Como dijera D’Ors, los jurisprudentes romanos que tenían auctoritas, pero carecían de imperium y coertio para imponer sus responsa, contribuyeron de manera decisiva a la creación del ius romanúm. Esa sería la función de los comentaristas: contribuir desde la auctoritas, que no desde la potestas, a la formación de una justicia sabia impartida por un poder independiente.
Yolanda Cano Galán, Profesora Titular de Derecho del Trabajo y Seguridad Social de la Universidad Rey Juan Carlos
10.000 maneras de conocer la ley a diario
Pocos diarios pueden decir que cumplen 10.000 números, por lo que sólo puedo comenzar por felicitar a Diario LA LEY por su impecable trabajo y proyección, que seguro llegará a la celebración de muchas otras cifras redondas de números publicados.
Levantarse por las mañanas y consultar las novedades legislativas y jurisprudenciales con el primer café del día se ha convertido en un hábito realmente aconsejable. A ello se añade la posibilidad de leer y releer los comentarios doctrinales o jurisprudenciales que realizan los relevantes juristas que colaboran con Diario LA LEY, y que resuelven las importantes dudas que todos los que nos dedicamos al mundo del Derecho nos planteamos en nuestro quehacer diario.
Especialmente relevante para mí, dada mi especialización en Derecho del Trabajo y Seguridad Social, son los interesantísimos estudios, comentarios, anotaciones, etc., a la normativa, jurisprudencia y doctrina laboral y de Seguridad Social, que todos los días aparece en el correspondiente número del Diario LA LEY, permitiéndome, de una forma sencilla, pero a la vez rigurosa, estar al día de todas y cada una de las novedades y reflexiones jurídicas a las mismas.
Comencé a colaborar con Diario LA LEY en 2017, en mi condición de Letrada del Gabinete Técnico del Tribunal Supremo y Profesora Titular de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad Rey Juan Carlos, con el compromiso que siempre ha inspirado a Diario LA LEY de informar a los suscriptores de las sentencias más relevantes dictadas por la Sala de lo Social del Tribunal Supremo.
Al hilo de dicha colaboración, y fruto de mis preocupaciones por aspectos jurídico-laborales problemáticos derivados de múltiples factores (cambios jurisprudenciales, cambios normativos con repercusión en la jurisprudencia, doctrina del TJUE o del TEDH con influencia en dicha jurisprudencia o normativa, etc.), Diario LA LEY me ha permitido compartir dichas reflexiones en forma de doctrina, en esa creencia conjunta de que el Diario LA LEY, en cuanto que instrumento que nos permite conocer de 10.000 maneras diferentes la ley a diario, debe comunicar a la sociedad en general, y especialmente a los operadores jurídicos, dichas preocupaciones.
Quiero agradecer personalmente a Diario LA LEY el que me permita seguir colaborando, aportando mis reflexiones sobre la jurisprudencia social y cualesquiera otras inquietudes jurídicas en un futuro (¡esperemos que por lo menos hasta el número 20.000, que seguro que llegará!).
Y no puedo más que felicitar a Diario LA LEY por el número 10.000 y agradecer la importante labor de divulgación jurídica que desarrolla.
Felicidades Diario LA LEY.
Víctor Manuel Comendador García, Diplomado en Criminología por UCM. Funcionario de Carrera de Instituciones Penitenciarias
Por su prestigio y calidad, tanto de actualidad como de profundidad científica, es base para todos los profesionales y operadores jurídicos
Con motivo de la publicación del número 10.000 del Diario LA LEY, quiero expresar primero, mi agradecimiento a la Publicación y a todo el Equipo que la hace posible.
Para mí personalmente que se me jubiló anticipadamente por accidente en acto de servicio, ha sido un importante nexo de unión con el mundo jurídico, ciencia de la que soy un absoluto vocacional, al haberme acogido como colaborador en este medio donde escriben plumas de mucho más alto nivel que la mía, lo cual, me ha obligado incluso a permanecer al día estudiando a fondo los temas sobre los que he publicado.
Debo dar fe absoluta que, en mis colaboraciones me expresé siempre con absoluta libertad, exponiendo mi punto de vista o prisma sobre el tema jurídico-profesional sobre el que he venido escribiendo sin que en modo alguno se me haya impedido verter en mis artículos ni el más mínimo detalle.
La calidad técnica tanto del equipo de la publicación, donde hay profesionales de una enorme talla profesional, así como los ilustres colaboradores de LA LEY, me han servido para enriquecerme como, supongo, les sirve a los suscriptores.
El Diario LA LEY creo es la «punta de lanza» de todo el conglomerado de aportación a los profesionales jurídicos de Wolters Kluwer, en una situación en que el Derecho, como ciencia social, está sufriendo cambios y vaivenes legislativos y como consecuencia jurisprudenciales en una sociedad cambiante y un tanto convulsa como es la nuestra, en la que el profesional del Derecho en cualquiera de su vertientes debe necesariamente mantenerse al día hasta el punto de que mi opinión es que el buen jurista, aun terminando sus estudios formales, en realidad, no termina nunca de estudiar en su devenir profesional y después, como es mi caso, en mi devenir vocacional.
Espero poder seguir colaborando con asiduidad en el Diario LA LEY, ya que, como digo al principio, para mi es motivo de agradecimiento el haber sido acogido como colaborador en una publicación que por su prestigio y calidad en materia jurídica, tanto de actualidad como de profundidad científica, es base para todos los profesionales y operadores jurídicos, pienso sinceramente que el Diario está en un lugar de lo más alto respecto de las publicaciones científico jurídicas de nuestro país.
En lo que a mi concierne ha conseguido que siga en conexión, al día y actualizándome continuamente, con la materia que siempre considere base de mi mundo profesional y que me apasiona en todos los aspectos, razón por lo que no puedo sino, como hago mediante estas líneas, estar agradecido y a disposición siempre de la publicación.
Emilio Frías Martínez, Fiscal. Fiscalía Provincial de Albacete
Desde comentarios a una reciente sentencia hasta artículos sobre el contenido de la última reforma legislativa o explicaciones al significado real de un precepto poco claro, todo lo encuentro en el Diario LA LEY
En los últimos años el ordenamiento jurídico ha sufrido una enorme transformación, en cada área de conocimiento surgen múltiples aristas que implican la necesidad de especialización, cuestiones específicas que exigen una respuesta que las grandes ramas tradicionales de conocimiento no pueden facilitar.
El Diario LA LEY se ha convertido en una herramienta básica para responder a esas cuestiones, acertados artículos que plantean cuestiones novedosas y proporcionan solución a cuestiones no planteadas doctrinalmente pero presentes en el día a día de todos los operadores jurídicos. Desde comentarios a una reciente sentencia hasta artículos sobre el contenido de la última reforma legislativa o explicaciones al significado real de un precepto poco claro, todo ello lo encuentro en el Diario LA LEY.
Como autor, en ocasiones me planteo esas dudas en el momento de enfrentarme al despacho de esos procedimientos o estudiando una nueva norma, para darles respuesta es necesario realizar un profundo estudio de una materia «poco trabajada», a veces, el tiempo dedicado fructifica en un artículo publicado en el Diario. Para mí es importante publicar esos trabajos, me permite dedicarme al estudio del Derecho y escribir, dos de mis aficiones, y espero que ayude a otras personas resolviendo las dudas que tengan, si, además, la publicación es en el Diario me puedo sentir orgulloso.
Mi más sincera felicitación al Diario LA LEY por estos 10.000 números que espero se conviertan en otros 10.000.
Mateo Juan Gómez, Socio Bufete Buades
Una guía útil y práctica a la que acudir diariamente para conocer de mano de autores reputados las polémicas doctrinales más notables y la jurisprudencia más actual
10.000 ejemplares, una cifra encomiable y tan elevada que supera incluso, con mucho, el número de horas que tiene un año natural (8.760). Y es que son muchos años ya los transcurridos desde que el Diario LA LEY se constituyó en uno de los principales referentes de la actualidad jurídica en nuestro país. Recuerdo mis inicios en la profesión y como en la sala de espera de nuestro despacho disponíamos cada día de diversos ejemplares, en papel por aquel entonces, doblados por la mitad debido a su característico tamaño. Aún conservo muchos de ellos, en particular algunos en los que tuve el placer de contribuir al contenido de las publicaciones. Para mí Diario LA LEY siempre será una guía útil y práctica a la que acudir diariamente para conocer de mano de autores reputados las polémicas doctrinales más notables y la jurisprudencia más actual. Pero también será el medio donde publiqué mi primer trabajo, hace más de una década, con la ilusión de quién sabe que su opinión será leída por un número elevadísimo de juristas a lo largo y ancho del territorio nacional.
Mis felicitaciones a Wolters Kluwer, por el trabajo bien hecho, garantía de éxito. No me cabe duda de que celebraremos en un futuro los 20.000 ejemplares.
José M.ª López Jiménez, Coordinador del proyecto de educación financiera Edufinet. Profesor de Derecho Civil en la Universidad de Málaga
Nos facilita estar al tanto de nuestras respectivas materias y, a la par, de la evolución general del Derecho
El primer artículo doctrinal publicado lo recordamos —yo, al menos— como el primer amor: queda grabado para siempre en la memoria. Y mi primer artículo, sobre las tarjetas bancarias, lo publiqué en el número 6.686 del Diario LA LEY, en 2007. Y también el segundo, un año más tarde, sobre las acciones colectivas y la protección de los consumidores. Estos dos artículos, estas dos disciplinas (la financiera y la protección del consumidor), han condicionado toda mi producción académica posterior, incluso mi forma de entender el Derecho y la sociedad a la que sirve y en la que se desenvuelve.
No puedo ocultar, desde un plano personal, la gratitud que siento hacia el Diario, al haberme ofrecido la posibilidad de compartir tribuna, humildemente, con verdaderos gigantes del mundo jurídico.
Soy lector asiduo del Diario desde hace cerca de 20 años. Cada jornada de trabajo comienza invariablemente con su revisión. Si antiguamente la atención prestada a la doctrina y la jurisprudencia era casi exclusiva, el Diario ha evolucionado para dar cabida a noticias y al análisis de tendencias.
Esta capacidad de adaptación, de la que la transición del papel a lo digital en 2016 es una inmejorable prueba, nos permite aventurar que a este número 10.000 le seguirán bastantes más.
Uno de los logros del Diario es que, siendo generalista, también permite profundizar en las diversas especialidades. Nos facilita estar al tanto de nuestras respectivas materias y, a la par, de la evolución general del Derecho, lo que nos sirve para recordar que la división de éste en diversas ramas responde, más bien, a una necesidad metodológica y pedagógica, que hemos de superar cuanto antes.
También destacaría que, en casos de verdadera relevancia, entre la aparición de una determinada problemática jurídica y la publicación de un análisis en el Diario apenas pasan días. Esto denota el dinamismo del Diario y su equipo y, lo que me parece tanto o más relevante, el compromiso de la comunidad jurídica que se ofrece a colaborar.
Y si los autores están dispuestos a desplegar el esfuerzo de analizar, casi en tiempo real, la legislación, la jurisprudencia y las tendencias, ello obedece, en mi opinión, al propio prestigio del Diario y a la calidad profesional y, sobre todo, humana, de su equipo.
Por lo tanto, solo cabe felicitar al Diario LA LEY, y a Wolters Kluwer, por extensión, por haber alcanzado este número 10.000 tras 40 años de recorrido, un éxito en el ámbito editorial jurídico que está al alcance de muy pocos.
Eugenio Llamas Pombo, Catedrático de Derecho Civil. Socio director de Llamas Abogados
Pone a disposición del jurista, de manera inmediata y generalista, pero rigurosa y cuidada, todas las novedades que cotidianamente se producen en el ordenamiento jurídico
Cuando Diario LA LEY cumple sus 10.000 números publicados es bueno recordar que el Derecho constituye una categoría histórica, dinámica, cambiante, producto de la experiencia jurídica, edificada cada día en contacto permanente con la realidad social, según nos enseñó D. Federico DE CASTRO. El Estado social y democrático de Derecho emanado de nuestra Constitución (casi coetánea del Diario) y, unos años después, la integración de España en la UE, han dado lugar a un torrente de información jurídica, legislativa, jurisprudencial y doctrinal que, sin duda, es difícil de digerir. Seguramente por eso, y por la calidad de su ejecución práctica, tuvo tanto éxito aquella idea, un tanto revolucionaria entonces (la periodicidad de las publicaciones jurídicas era, como mucho, mensual), de brindar una publicación diaria que pone a disposición del jurista, de manera inmediata y generalista, pero rigurosa y cuidada, todas las novedades que cotidianamente se producen en el ordenamiento jurídico. Sucede, además, que las personas a cuyo cargo ha estado sucesivamente la publicación durante todos estos años, han sabido desarrollar con brillantez y constancia un trabajo que no es nada fácil, por la exigencia que supone seleccionar, preparar y editar cada día un producto editorial de calidad, tan variado en su temática y verdaderamente generalista. Han perpetuado así aquella idea, un número tras otro, durante más de 40 años. Muchos de ellos me honran con su amistad y por ello agradezco aquí su esfuerzo y les transmito mi felicitación, extensiva a «mi casa» (editorial, y algo más) Wolters Kluwer.
Eloy Velasco Núñez, Magistrado-Juez de la Audiencia Nacional
Un espacio, un compendio de Derecho vivo, de Derecho de unos y otros, que ha contribuido a aportar conocimientos rigurosos
Quienes ya llevamos unos cuantos años de ejercicio profesional en el mundo del Derecho y hemos venido pasando por cientos de vicisitudes y cambios, algunos para bien y otros para no tanto, solemos coincidir al reflexionar sobre ese paso del tiempo, —no sin poca nostalgia de que cualquier tiempo pasado…. ya se fue—, que, sin el consejo, la enseñanza, la visión diferente de los otros, las cosas no habrían evolucionado como lo han hecho.
Y eso ha venido ocurriendo con el Derecho y con el apoyo para conocerlo y entenderlo que ha venido, día a día, aportado el Diario LA LEY, que alcanza estos días su número 10.000, que se dice pronto, —me los he leído todos de arriba a abajo…—
Porque en sus páginas, día tras día, siempre hemos tenido puntual y actualizadamente la interpretación y la reflexión de la doctrina, la jurisprudencia de los Tribunales, la legislación y sus novedades, de manera que, en los demás, leyéndoles o simplemente discrepando de algo de lo que decían, hemos ido aprendiendo y evolucionando en esa creación común de todos que es el Derecho, que, seguro, habrá servido, y mucho, para solucionar problemas a los ciudadanos.
Recuerdo mis años jóvenes de Juez recién aprobado en que me suscribí al Diario LA LEY, entonces en papel, que se encuadernaba en tomos que recogían voces jurídicas y resoluciones alfabéticamente, que pegaban divinamente en la biblioteca con otros libros, y que siempre consultaba.
Más tarde se digitalizó —ahorrándonos horas de búsqueda—, obligándonos a encontrar las cosas de otra forma y desde cualquier localización…, lo que no quita que siempre haya seguido siendo, con las aportaciones de sus colaboradores, un espacio, un compendio de Derecho vivo, de Derecho de unos y otros, que ha contribuido a aportar conocimientos rigurosos luego trasvasados a sentencias, artículos, charlas o libros, contribuyendo a esa creación común, desde la diversidad y la pluralidad.
Por eso, enhorabuena al Diario LA LEY, no ya sólo por alcanzar una cifra redonda de números que no es fácil de lograr, —menos en la categoría de productos y servicios del intelecto en estos tiempos que corren—, sino también, y sobre todo, enhorabuena por lo que significa servir para seguir aunando a esta familia de juristas que, desde diferentes lugares, dedicados a ramas del Derecho muy diversas y algunas hasta disruptivas, formamos quienes la consultamos, y que, con la ayuda de la publicación, ha permitido, leyéndonos unos a otros, que a su través todos hayamos podido contribuir a mejorar los conocimientos, soluciones prácticas, teorías y disquisiciones que el Derecho trata de solventar.